jueves, 20 de diciembre de 2012

LA TRAMPA I


                 I

Balbuceo inconsciente
en mi cuerpo
entre sabanas tiesas
insisto en bajarme
de los sueños y caigo
casi en la verdad.
Me despabila el murmullo en lo oscuro
¿conspiran contra los ángeles?
corro y levanto cortinados y pértigos.
Quedo pegado a una ventana
que me imprime su realidad fría
veo y me encuentro
rodeado de esqueletos grises
susurrando golpes de estado.
Seres diminutos los forran de carne
en bloques rosáceos,
burlan el gobierno de mi naturaleza,
la invierten.
Brotan hasta el cielo.
Edifican barrotes a esos ángeles ciegos
que lloran lenguajes perdidos
y en vez de guardarnos sus vistas,
perpetúan nuestros años.
En estos barrios del sur
el mar nos trae sus plumas perdidas
a las costas frívolas 
donde reímos con sus cuentos
hasta llorar rocío para las calas
del féretro en vida.

martes, 4 de diciembre de 2012

LA TRAMPA II


      II

Salgo sin apuro
en Mar Del Plata lluviosa,
pero no elijo lo obvio.
Camino la calle empapada,
la gente se resguarda
hacia dentro,
confusa
esquiva el néctar que les da el vivir.
Almas vaciándose,
acurrucadas,
fetales
buscan recuperar amor negado,
suspiran en bolsas;
veo esas risas tristes
y la empatía
me ahoga,
ya pasó el tiempo de luchar
esa pelea.
Si no puedo cambiar lo viejo,
debo dejarlo morir.
Hacerme cargo
es tomar herramientas
de esta vida que elijo
o cortar correas
para truncar la máquina
que consume el deseo,
y tapa ese anhelo
que atrae nuestra felicidad.


jueves, 29 de noviembre de 2012

LA TRAMPA III


III

La ciudad es una trampa:
quiere matar,
en cada esquina corres peligro
inhumano
se cierra sobre tus ojos,
te venda su falsedad
hasta dejarte las ganas pesadas
como cristos.
Me escurro entre sirenas 
y propaganda berreta,
busco las estrellas de la noche
tras las perlas de mercurio.
Camino despacio,
dejo atrás avenidas,
trapitos y fuentes.
Encuentro en otras voces
lo terminal de esta enfermedad muda
que quise ver alejada
de mi barrio.
Ya no vivo el pasado
hoy lo acepto para sentir
y no padecer entre muecas
implantadas
esclavistas,
ser ayer es oxidar bisagras
como lamentar cumpleaños.
No acepto repetir la culpa,
que mi libertad consuma el rencor
para andar sin su carga
y dejar mis muletas de calas.
   


lunes, 17 de septiembre de 2012

OASIS



En el horizonte de la ruta
los arboles saludan al viento,
me peina su invisible mano,
un oasis se evapora frente a mi
una y otra y otra y otra vez.

Las horas se espantan
por los ents en estampida
mis parpados pesan,
te veo.
Sol se va a su guarida.

Los espejismos son muchos
el agua, vos, pero no tu amor.
-
-
-

PD: Este poema lo encontré garabateado en un papel,
 creo saber a quien iba dirigido. Está fechado "29-6-03"

miércoles, 5 de septiembre de 2012

LA SOMBRA DE LOS NIÑOS Y NIÑAS SIN NOMBRE



A lxs sin nombre
A ese viejo roquero
A Hector
A Victor Clementi


                                                                                                  I
No hay nadie ahí. Ella está. Puebla el suelo su mirar negro, me espera.

Un viejo roquero me sorprendió en el camino y sentenció “¡desde hoy vas a aceptar esta prisión!”
Tenía el dedo índice torcido como aquel anciano Pataxó, quien dijo en Porto Seguro, que mi sombra es la cuna de mi muerte que me acompaña en su espera.

¡Muñeca raquítica voy a vos sin remedio! Adoro tu figura siempre a mi lado, bailando en mil siluetas. Jugas a tocarme, pero no puede ser aunque de noche me abrazas en un vestido tenue. 
Te negué mis ojos alguna vez, erguí mi cabeza y el Sol los quemó, ahora creo que es solo tu aroma lo que intuyo. Quizá sean las flores sepulcrales lo dulce que prueba mi olfato ¿o será mi  propia negación?

Y sigue sin haber nadie ahí. Ella está.

                                                                                                II
No voy a hablar de los que nadie habla   
porque ellos ya no tienen un nombre,
por lo menos, uno que pretendamos recordar
¿Quien soy yo para describir la nada?
Que no tiene lagrimas o miedo a la ignorancia
ni a la que nos inventamos ni a la de verdad.
Los que no tienen cuerpos para ser violados
ni imágenes cargadas para que alguien trafique
¿dónde irán a pedir ayuda con sus voces amordazadas,
en que hombro huidizo caerán a llorar?

                                                                           Maximiliano Costa Martínez 











domingo, 5 de agosto de 2012

VIAJEROS


                    
                                                              A Lectores y Poetas                 


Tanto poema  descubierto ha nutrido mi camino pero aun así pregunto. ¿Qué cosa son? Dudo al toparme con este vestigio de un lenguaje rúnico. ¿Cómo usarlo? Ya que apenas comprendo los signos que entre sus términos se ocultan. ¿Qué sirven? Los veo como bandejas repletas de platos sombríos, huidizos a la luz que no necesito al masticarlos y empacharme de libertades. ¿A quién son útiles mientras soy eco de su dicción? ¿Dónde vienen? Quizá en trasfusiones de su querubín a mi ángel.  

Quizá estén más cerca de ser instrumentos con los cuales dar        sentido
o utensilios para poder digerir ciertas ofertas que la vida nos propone.
No creo que sean islas donde el lector llega
para disfrutar de la flora y fauna exóticas.
Más bien un puente a vela,
una balsa para atravesar el mar embravecido 
o un catalejo para ver esa ola que se aleja ya dentro del continente,
esa que me alcanzó por descuidado y si la ocasión lo permite
puede prevenir otros maremotos.
O ser un poderoso trampolín


                                               Cada obra es un océano en sí misma y me plantea su universo que al ser afectado con mi esencia, cuando lo interpreto, se expande como luz bajo las olas. Inunda mi cuerpo y me adopta al escurrirme las burbujas.  Este cosmos de siluetas nuevas está familiarizado con otras creaciones del poeta y de múltiples soñadores que han hecho posible su existencia.
Creaturas sutiles penetran los ojos de quienes buceamos en estas oleadas. Y es valiente el que vive enlazando mis ríos en los suyos con la vista reducida hasta el marco de su escafandra. ¿Cuanto más podremos ver si seguimos respirando el aire obtenido en nuestra tierra?     ¿Qué alucinaciones provocamos?       ¿Nos preguntamos siquiera?

En cuanto a las formas del poema, desde sus caídas accidentadas o lacias, ya sea en plenas verticalidades o más ceñidas por las bases. Lo que no se puede descartar es el punto de fuga y sus niveles de profundidad. Los seres que en él conviven y que se comunican con la ética profunda de los genios de Trioska y Ka hacen su versión de la muñeca rusa. A su vez gritan éstas  mientras caen o trepan el vórtice que las contiene.

Si bien algunos poemas tienen inspiración en una buena anécdota y se alimentan de ésta. Al correrse el autor de aquel humor, ya que se empapa de quien sabe que naturalezas hasta que lo transforman (mientras unos leen su mensaje por primera vez) es él quién ha de reverlo y es así como suma otro punto de vista.
Una nueva refracción se expresa sobre la superficie que enfrenta en su obra. Descubre que ha dejado de ser un satélite suyo. Ganó su lugar de Ser autónomo produciéndose el dialogo entre ellos, pues más que un mero texto es una antigua versión de sí.

Por esto estoy seguro
de que al avanzar
en algún sentido de la vida
recogemos peras del olmo que sembramos.
Como huella nómade
vaga bifurcada la guía que se ha gestado
de esa semilla olvidada
en un terreno que porfiábamos nuestro

lunes, 4 de junio de 2012

NOCHES CORTADAS


NOCHES CORTADAS 

Las flores para vos
se contraen
retrasan cada pétalo, sostienen tus espejos de rocío.
Todos los días se guardan, ruegan que dobles su esquina,
esperan la oportunidad a que tu mirar complete su belleza.

Te quiero un poco más de lo necesario…
Ni bien me ves mando a levantar glaciares.
¿Pero qué función cumplen ante vos, diabla
con pecho de incendio?
Al oírte con atención supe de donde venía tu primor,
tu brillo no se conforma con adentros
brota por tus labios, tus ojos o…
¡Sí, tus ojos!
Que me asolean en esta luz de chocolate.

Mi ombligo sobre tu espalda patina sudor y algo sacude,
tu risa se expande en mis dientes
que muerden tu alma
entre llamas…

Me despierto madrugada ya que galopás mi corazón,

nunca fue insomnio, sino el exceso de aquel sueño.

                                                  MAXIMILIANO COSTA MARTÍNEZ

















viernes, 25 de mayo de 2012

CONTRAATAQUE


        


Hace nueve años colgué mi viejo vestir
en un placard de mi casa platense.
Quiero disfrutar el sabor de los aires
no ese amargo cigarro que nos encajan desde verdes. 
Ya voy pisando este, mi propio Soy
que no busca donde ir, ya que viene de vencer.

Digo que no me marchita el dolor
porque me nutre la muerte,
ella abona mi fuerza, más por aguante que por destino.
¿De qué sirvieron mis llantos, lamentar los despojos
de todos esos fumadores muertos?
Hoy me levanto transformado, dando este golpe sombrío.

Vos, con un motivo secreto me lanzás un ataque fiero,
son esos tentáculos grises que me devoran el aire
y yo quedo cautivo de mi amistad.
Más que mi cuerpo roés, aún me llama esa tentación enferma
que le da un gusto a carcajada
a toda noche que no beso el anzuelo.
¿Hay duda antes de encender ese arma,
tenés piedad o tu amor ya está frío?
Calmás solo tu ansia al compartir este veneno.
¡No tenés que mirar solo con amor, sino que hay que obrar!
Hay que obrar…
Yo te quiero tanto amigo y estoy dispuesto a morir,
como si fuera un pibe de Malvinas
que sabe la que viene
pero se entierra hasta las rodillas
y te aguanta en tu infierno de ojos destrozados.        

Las chimeneas fabriles marchitan nuestro mundo
y como si no sobraran colmos, te burlás siendo su modelo.
Estrechar veneno en tus manos, respirar basura que flota
es el mal que recibo sin pedirlo.
Camino esta batalla de silenciadores
y vos, rehén de un imperio, como una estrategia patética               haces un recreo para el exterminio.            

Me gusta ser el expositor de nuestra verdad nublada
porque soy un triste asistente a tu pena.     
Aunque es cierto que sos el dueño de tu hacer
y podes entre otras cosas vulnerarte
pero compartís tu padecer con quién te ama.

¡Como gritos de esta voz que hace ecos en mi espíritu,
ya disparé la aversión al fumador, que se atrincheró
para batirse desde
mi pecho que no calma!


                        MAXIMILIANO COSTA MARÍNEZ

viernes, 18 de mayo de 2012

SIN MAGIAS NI PLOMADA


                                               SIN MAGIAS NI PLOMADA
       A los obreros altruistas

No es un martillo quien junta   los clavos no unen maderas
ni una chapa      cubrió tu familia
No es el alcohol que reseca los hígados    o la caja boba    quien hipnotiza
Los cigarros no se queman sin que pitemos       y el cenicero          no se tiñó solo   
       como nuestros vasos        lo decoramos
¿La roña   salpico un zanjón               o              al derrapar      metimos la pata?

Toda ayuda que buscás fuera        está guardada            dentro tuyo
esperando y es                         la maquinaria más pesada       
  Mientras no la uses ocupa lugar           en el nivel de tu equilibrio

Fuiste vos quien agarró     martillo               clavo                  madera                      chapa
Te creció el rancho                como el cabello                        pero con maña
Cada palo oculta su historia detrás               sabés bien qué pared es fuerte
y qué rasgo inconcluso                   dejaste                            aprisionado en tu mente       

viernes, 4 de mayo de 2012

VIOLEN A LA NORMA



                                           A quienes derrochan ser


Agradezco a los exagerados
quienes están más allá de los límites
y matan al patrón.
Su vistazo cae tras la frontera de los desmoldados
por esa realidad que confina.
Perseguidos y chivados de bizarros o de locos,
protestan fuera de chalecos convenientes. 
A ellos aplaudo.
Mentiras de mierda empujadas por corbatas y ratis
(para ahogar de miedo a lo otro, lo prohibido)
son enterradas como balas en mil sienes.

La revolución de los sujetados cuestiona:
¿Que hay de innegable en esta ciudad enferma?

Son miradas frecuentes, echadas en las esquinas
chicas-trans y borrachos
que a nivel o desde el suelo
piden permiso para ser,
pero el vientre amputado vomita su rostro
asqueado de tanto veneno.
Su lucha remendará la justicia 
hasta que este mundo deje de ser.

Que sus espinas corten alambre
y anden donde quiera su estilo
sin que sus púas se paren por nada.
Locos sin cobardías. A su éxito sumo mis pliegos

domingo, 15 de abril de 2012

RECETA DEL ABUELO PARA SER LIBRE EN 3 PASOS

RECETA DEL ABUELO PARA SER LIBRE EN 3 PASOS

  • Sostenga una ciudad cualquiera entre las yemas de una mano, recuerde tener mucho cuidado porque de sus cascaras hay muchas falsas y en el caso de pinchar su integridad podría cubrirlo y así creer que ella es parte de su piel.
  • Cásquela contra un existencialismo que tenga en su cocina (no es necesario que use el que puede ver acá). Al caer todo el interior homogéneo si examina sabrá notar caracteres diferentes con propiedades únicas que desde fuera del cascarón pasan como otras invisibilidades al ojo que no busca.
  • Reúna las partes sanas con las podridas, busque en la alacena Humildad, Amor, Respeto, Confianza, Lealtad y todos los valores que encuentre en tachitos dispersos de su ética; revuélvalos hasta lograr un preparo espeso y bien honesto.

Cocción: Lenta mientras revuelva. El fuego debe permanecer muy caliente

lunes, 2 de abril de 2012

VENTANA EN LA NOCHE

VENTANA EN LA NOCHE
Luna pirata usted me asalta
mengua mis ansias,
afloja mi conciencia,
me señala tras el lago
con su mástil fantasma,
se hace mi cómplice de luz.

Usted Luna de lata, cáliz
lleno de leche materna,
eleva su brindis angelical
huidizo de mí; la espero.
Anheloso por llegar a La Guía:
hallar su amor justo,
dejar éste.

Cuarzo blanco, cometa puro,
Diosa Heroica,
medalla de los cielos.
Calme mi sed,
alivie mi pesar, despójeme.
Envuelto en mi pena
me enluta una capa liviana.

Veo sobre mi hombro y la dejo flotar,
temeroso de que robe mi semblante.
Castigo es lo que imprime
mi mano en el atajo.
Es lo que elijo, Dama Heroica,
mi mueca pesada.
Lléveme a La que nos guía






















jueves, 22 de marzo de 2012

JUJUY y 3 DE FEBRERO

JUJUY: 3 DE FEBRERO

Hoy martes 12 de Julio, cuatro meses que volvimos del centro tras aceptar con humildad que los números estaban a un paso de volverse calientes. Con las últimas de verano esa tarde quiso guardarse como otra moneda de cobre en las hendijas puercas de lo usual.
Llegando a 3 de Febrero por Jujuy a pié frente al hotel, quise transformar la noche magra en algo más cuando una criatura cruzó la trama irregular de baldosas sueltas hacia la calle.

Su suerte está resuelta, la penumbra que no ayuda al conductor del Mercedes champaña, mi asombro que me deja expectante-funcional a la picadora de carne, sus padres que no corren detrás como en mi orden natural. Las piezas encajan. Su muerte se conjuga.

Pero todo cambia, somos invitados a danzar los pasos como si un quinto los contara: resbalé sobre barro en equilibrio, pise cordón, asfalto, paso largo. Ella corre hacia ruedas que se retardan, conduce solo y sin mostrarse se aleja mientras le hago upa.

Nos miramos un segundo larguísimo
Es precioso
Somos el momento

Llora y patalea mientras la entretengo, la ofrezco a mi compañera con fidelidad, hasta acá llega mi magia y comienza mi mal genio en buena vibra. Busco padres, mi alma marea mis adentros en el absurdo de entender lo inaceptable. Con los brazos tocando cada puerta, se alistan los extraños con la sola intención que puebla nuestros ojos.

Me indigno en la respuesta pobre que dicta “debe ser un chico de la calle” como si la vía tuviera úteros empedrados entre los durmientes. Mi mano quiere estrangular o romper pero mi pierna pivotea al seguir no sé qué plan de devolverla a su madre, de encontrar la respuesta.
Regreso a esta noche en 3 de Febrero en pleno marzo, donde hay más luz que en esos cráneos.

Y veo la perla en lo alto, sostenida por brazos negros de esa madre sustituta, sonriente, libre al fin de esa gorda ausencia que la poseía aun en nuestro abrazo perfecto.
La estampida insana se mueve lerda sobre pavimentos jugeños, reclama la niña quién responde a la flaca que la escupió, que la dejo ir.

Ellas se alejan sin articular palabra alguna, sin mencionar su nombre